El Día Nacional del Gaucho se celebra el 6 de diciembre de cada año. La jornada recuerda la publicación de El Gaucho Martín Fierro y La vuelta de Martín Fierro, libros escritos por José Hernández. El móvil de Nacional LT12 tomó contacto con uno de los gauchos más conocidos de nuestra ciudad, Luis Samite.

Luis Samite, integrante de la Fundación Yayetopa, es uno de los grandes conocedores de la vida gaucha, y en la entrevista nos deleitó con su conocimiento sobre la importancia del gaucho, especialmente este día tan especial para ellos.

En el día nacional del gaucho, quiero saludar a toda la gente campera que, de sol a sol, están haciendo sus tareas. En la provincia de Corrientes el gaucho es el “hábil jinete, diestro en la doma, el arreo y en el manejo del lazo”. A su vez, reveló que hace un “culto del mate compartido” y que pocos son tan buenos asadores como él.

El 6 de diciembre, dio a la luz el libro de José Hernández titulado "El Gaucho Martín Fierro", en 1872.  El gaucho fijó el arquetipo de nuestro ser nacional, de nuestra identidad, y eso quedó plasmado en nuestra biblia gaucha, como el Martín Fierro.

El Martín Fierro, está traducido en más de 60 idiomas, como checoslovaco, en húngaro, en chino mandarín, y entre tantos está obviamente está el idioma guaraní. Siempre le digo a las personas, ustedes abren el libro, toman cualquier página, y van a encontrar un mensaje y una enseñanza, ahí van a encontrar las parábolas gauchas de don José Hernández, como “Junta experiencia en la vida hasta pa dar y prestar quien la tiene que pasar entre sufrimiento y llanto, porque nada enseña tanto como el sufrir y el llorar”, rememoró Luis.

En esta parte del país, siempre está la evocación presente, como decimos los correntinos, en una enchamigada, mate de por medio, luego de compartir el mate viene un churrasquito, una comida criolla, un guiso, un mbaipy, como estamos acostumbrados, y de ahí siempre salen cuentos, narrativas, anécdotas, y de ahí está la esencia, siempre alguno tiene una anécdota, que vio en algún paraje.

Los tiempos han cambiado, pero no los usos y costumbres, hoy tomamos mate con un termo, pero está la esencia del mate, está Andresito ahí en la yerba presente, entonces eso es lo que uno tiene que guardar, las raíces para que las nuevas generaciones sepan de dónde venimos y hacia dónde vamos, transitando por huella firme, diría J. Hernández, sentenció el gaucho.