Primero fue una súbita mortandad de peces, ahora de aves autóctonas. La laguna de El Viborón, parte del sistema de humedales del oasis norte de la provincia están en el foco de reclamos de vecinos, vecinas y asociaciones ambientalistas.

Fundación Cullunche, se ha puesto al frente de los reclamos y denuncias para que el Departamento General de Irrigación constate el daño ambiental acontecido en esa laguna y realice las acciones necesarias para subsanarlo.

Jennifer Ibarra, titular de Cullunche, explicó en Vamo que venimo, que el principal problema suscitado en el sistema de lagunas es la falta de agua, ocasionada por taponamientos que el DGI no atiende ni resuelve.

“La poca cantidad de agua en la laguna provoca que aumente las concentraciones de salinidad y esto perjudica la cadena propia de ese ecosistema, del que también somos parte, ya que esos humedales ayudan a equilibrar la vida en las zonas urbanas”, detalló Ibarra.

Desde la fundación, como la comunidad de la zona de la laguna, que comprende los departamentos de Lavalle, Maipú y Guaymallén, han reclamado a la justicia que active los mecanismos necesarios para atender esta grave problemática ambiental, que paulatinamente, afecta a todos y todas.

Esto expresaba Jennifer Ibarra, de Fundación Cullunche, en diálogo con nuestra radio sobre la situación de El Viborón y acerca de la desatención y abondo de los humedales de la provincia: