Los hermanos Gustavo Carlos y Miguel Ángel se refirieron a sus relación con la militancia política desde muy temprana edad, como fueron adentrándose y relataron el reencuentro con su sobrino.
Gustavo, quien hizo referencia a su rol de fotografiar a los genocidas que incumplen con la prisión domiciliaria, relató el evento en el cual su hermana, quien estaba embarazada, fue secuestrada el 17 de octubre de 1979 y la posterior recuperación de su sobrino el 30 de octubre de 2009.
“La familia Molfino tiene una historia de militancia de larga data”. “Con 8 o 9 años arrancaba leyéndome la vida del Che, el cual era uno de mis ídolos y mi idea era imitarlo en la historia” contó Gustavo.
Miguel Ángel destacó que la militancia en su familia “inició por la educación en libertad que nos dio mamá”: “Nos permitía pensar y avanzar en nuestras búsquedas existenciales de manera abierta, de esa manera se fue formando esa especie de familia consciente de la realidad”
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