Matías Perdomo, integrante del Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos Mendoza, reflexionó en Temprano es Mejor sobre la reciente muerte de la incansable militante por la Verdad, Memoria y Justicia, Beatriz García.

Contó que Betty se incorporó a la militancia peronista desde muy jovencita en los 70, y antes también. Sufrió en cuerpo y alma el terrorismo de estado tras caer presa en el ex casino de suboficiales durante 8 meses en 1976. Este delito y los crímenes de gran parte de sus compañeros fueron juzgados en los juicios de lesa humanidad desarrollados en Mendoza.

Dedicó gran parte de su vida a seguir el rastro de su amiga y compañera detenida desaparecida María del Carmen Pichona Moyano, al punto de encontrar a la hija de la misma hace unos atrás. La niña, hoy adulta, había sido apropiada y se convirtió en la nieta recuperada n° 127.