El pasado fin de semana culminó el rodaje de la película "El infierno de los vivos", una adaptación libre del director Alberto Gieco sobre el libro homónimo de Alicia Barberis. El proceso tuvo lugar en las localidades de Santa Fe, San José del Rincón y Santa Clara de Buena Vista.
"Tengo una relación muy profunda con Santa Fe. Todo el proceso fue maravilloso. Tuvimos un equipo increíble trabajando con mucha pasión y entrega", comentó el director en diálogo con Sospechosamente Light.
Respecto a los paisajes, Gieco hizo una referencia especial, y mencionó casas antiguas de Santa Fe y ambientes de su localidad natal (Santa Clara de Buena Vista). "Tengo un punto de vista estético que incorpora mucho el ambiente de los personajes", señaló. Y agregó: "Todas las locaciones tienen algo antiguo, lo que está desapareciendo; fue una vuelta emocional en busca de mi pasado".
En otro tramo de la entrevista, el realizador santafesino contó que hace 11 años le llegó "El infierno de los vivos" a través de su tía Mafalda. "Me emocionó el libro, la forma, me tocó", describió. Al mismo tiempo, aclaró que el largometraje "es una adaptación realmente libre".