Anita Carrizo, Coplera y comadre Eulalia dialogó acerca de la esencia del carnaval catamarqueño, con sus características y lo que se mantiene a través del tiempo desde épocas ancestrales.
"La harina tiene un significado, nos iguala, nos cubre, nos esconde para ser libres y compartir la alegría de poder ser lo que no somos en el resto del año; por eso no puede haber carnaval sin harina".
Recordó que "Mis primeros carnavales fueron en el patio de mi abuela en La Tablada, era de jugar mucho con agua y barro con mis primos. Luego en las 250 eran las guerras de bombuchas, el ensuciarse, jugar sanamente fueron parte de mi infancia".
También comentó cómo trajeron con las Comadres Eulalias las tradiciones del interior de la provincia, "con los topamientos, cómo se entregan las guaguas los jueves de comadre y se crean otros lazos".
Agregó que "Las Comadres tendremos nuestra Chaya el Sábado 17 en Cachalahueca Florida 660, desde las 17.00 y hasta las 23.00 y lo que nos distingue es que hemos preparado un espacio para las infancias, porque es lo que nos identifica".