Roma, 1816. En el Teatro Argentina un público curioso, más bien hostil por no decir conspirativo, se apresta a presenciar la puesta del Barbero de Sevilla de un joven Gioachino Rossini quien tuvo la osadía de retomar el tema de la comedia de Beaumarchais, que ya había abordado triunfalmente el venerado Giovanni Paisiello. El estreno fue un fiasco de dimensiones dantescas, con abucheos y risotadas por parte del público y sarcasmos varios por parte de la prensa. Sin embargo, al día siguiente, la segunda representación (sin la dirección de Rossini, abatido por el fracaso del estreno) fue un éxito que aún perdura y se convirtió en leyenda.
- El Estreno y su Leyenda. Todos los domingos al mediodía.
- Idea y conducción: Santiago Giordano.