Johann Joachim Quantz fue un flautista y compositor sajón, nacido en 1697, que dejó unas 200 sonatas y 300 conciertos para flauta. A este notable músico se le atribuye la invención de las llaves que permitieron el desarrollo de nuevas técnicas de ejecución, mucho más precisas y más ágiles. Además, Quantz, desde 1728, fue el profesor de flauta y de composición de Federico el Grande de Prusia. Con todo, Quantz tuvo un período de gloria exclusivamente argentino cuando hace más de treinta años, uno de los movimientos de una de sus sonatas para flauta travesera, flauta dulce y bajo continuo, en una versión con aires de jazz, ofició de acompañamiento para la publicidad de un cognac, ciertamente una publicidad que hizo historia y que hasta hoy es recordada por quienes la vivieron allá lejos y hace tiempo. Fue así que, gracias a la televisión vernácula, Quantz disfrutó de una celebridad como no la tuvo en ningún otro punto del planeta. Sin ritmos de jazz, así era la música de Quantz que nos invitaba a beber una copa de cognac.
Johann Joachim Quantz