El 18 de julio, Daniel Avilés, un padre de 4 hijos y de profesión albañil se transformó en el primer donante de médula ósea no emparentado de la ciudad de Gualeguaychú.
Con su gesto le salvó la vida a un bebe argentino de dos años, tras un trasplante en el Hospital Alemán.
En Radio Nacional, Daniel contó cómo fue el proceso de donación.
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