Trabajadores y trabajadoras del Gobierno porteño advierten sobre la falta de prestación de servicios de salud y la reducción de espacios recreativos correspondientes a la Obra Social de la Ciudad de Buenos Aires, como parte de una situación crítica que la pone al borde de la quiebra. Alicia González es docente jubilada del grupo de afiliados autoconvocados de ObSBA y denunció que “están tendiendo a cerrarla y privatizarla”.

En esa línea, remarcó que “no queremos atención privada ni ninguna salida por la privatización sino que la obra social siga trabajando” y advirtió que “la situación es gravísima”, sobre todo para las y los jubilados.

Anticipó que el martes se concentrarán en la sede central de ObSBA en Avenida Rivadavia al 6000, en el barrio de Caballito “para reclamar que se abran los libros” contables.

“Queremos saber qué pasó con nuestros aportes”, porque “la caja es grande”, apuntó González, quien agregó que el gobierno de la Ciudad “avanza con la tercerización y la falta de atención”.

Por otro lado, consideró “alarmante” que se cierren los tres hoteles de turismo que tiene la obra social y, en ese sentido, enfatizó “es un fenomenal negocio inmobiliario”.

ObSBA nació en el 2000 tras la sanción de la Ley Nº 472, pero permanece intervenida por el Gobierno de La Ciudad desde 2008, cuando Mauricio Macri era Jefe de Gobierno de la Ciudad.

Durante las últimas semanas, el presidente de la obra social, Juan Carlos Cela, dictaminó en forma unilateral el cierre de hoteles de afiliades, radicados en Mina Clavero y Salsipuedes, provincia de Córdoba, así como en la ciudad bonaerense en Mar del Plata, lo que conlleva el despido de trabajadores que se desempeñaban en esas residencias.

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