A lo largo de la historia México ha sufrido varios terremotos, por ejemplo el ocurrido el 19 de setiembre de 1985, de magnitud 8,1 y cuyo epicentro se localizó cerca de la Capital; con un lamentable saldo de víctimas fatales.

En esta oportunidad el epicentro fue en el extremo Sur del país, zona con menor densidad poblacional. De todos modos, estructuralmente el país está preparado de otra forma para soportar eventos de esta naturaleza.

Tames señaló que “a raíz del sismo del ‘85 se ha instituido una cultura sísmica en nuestro el país, específicamente en la ciudad de Méjico y eso nos ayudó mucho a que hubiera una evacuación normal, tranquila pero efectiva. Afortunadamente no se registraron los daños del ’85. Lamentablemente en el Estado de Chiapas nos reportan 10 muertos, pero en ciudad de Méjico el saldo es blanco”.

“La pérdida de vidas es lamentable -puntualizó- pero teniendo en cuenta la magnitud del sismo, el más fuerte en nuestro país en los últimos 100 años, la pérdida de vidas ha sido mínima, gracias a la cultura sísmica que ha adquirido el país”.

El sismo ha tenido una duración aproximada de un minuto.
“Estamos ya espantados de los temblores, el susto fue mayúsculo, las calles se llenaron de gente, los edificios se vaciaron e inmediatamente el gobierno de la ciudad de Méjico aplicó una supervisión muy efectiva por tierra y aire.”

Tames mencionó que en la ciudad de México hubo simultáneamente una tormenta eléctrica, fenómeno que normalmente acompaña la ocurrencia de sismos. Dijo también que en países vecinos ha habido daños estructurales importantes, caso puntual de Guatemala.

En México hoy no habrá clases en 11 estados, que son del Sur, precisamente para revisar la estructura de las escuelas.
La gente ha salido a trabajar y el sistema del metro está funcionando normalmente.