Nos visitaron dos integrantes de ALCO en nuestra ciudad que relataron las vicisitudes que atraviesan las personas con sobrepeso, incluyendo las “recaídas”, que las impulsaron a volver recurrentemente a los encuentros de la entidad.
“Se trata de quererte y tener una constancia en la voluntad de bajar de peso”, nos dijeron las visitantes, Cecilia y Nora.
“Todo está permitido. Nosotras debemos controlar en qué dosis lo podemos hacer para no privarnos para siempre de aquello que más nos gusta”, agregaron.
Recordaron que la Ong tiene en marcha un segmento para los más chicos denominado “Alquito”, que intenta contribuir al cambio de hábito alimentario que evite el exceso calórico desde las edades tempranas.
VIEDMA