Luis Bremer conversó con Mariano Martín, periodista especializado en temas gremiales sobre el desplazamiento de Antonio Caló tras 18 años en la conducción de la UOM.

“En muchos casos los cargos en los sindicatos tienden a ser vitalicios, se han visto algunos cambios, pero en la UOM en los últimos tiempos la permanencia de los líderes coinciden con su ciclo vital”

“Hasta la semana pasada no había un indicio muy certero sobre la posibilidad de un recambio, en las elecciones de las 54 seccionales del gremio hubo disidencias, malestares dirigidos a la conducción de Caló, hay que tener en cuenta que Abel Furlan no es un outsider, integró desde hace años la mesa chica del sindicato.”

“También la mirada política es insoslayable, Caló, al igual que muchos dirigentes de los sindicatos más tradicionales se recostaron en la figura del presidente, en oposición a las posturas de Cristina Fernández de Kirchner, con quién Furlan se encuentra alineado, recordemos que fue candidato a diputado por el Frente para la victoria para el período 2015 – 2019.”

“El relevamiento de la conducción de la UOM es multicausal, hubo un distanciamiento entre la cúpula y el activismo.”