El parlamento griego aprobó el matrimonio igualitario con 176 votos a favor, 76 en contra y dos abstenciones y se convirtió en el primer país con mayoría cristiana ortodoxa en tener una normativa de estas características. Aunque ya se reconocía la unión civil entre personas del mismo sexo, la ley permitirá el derecho a la adopción de niños, aunque no la subrogación de vientre.

En diálogo con Nacional Rosario Fontanarrosa, Gabriel Marino, un argentino residente en el país desde el 2014, se refirió al debate social que generó la ley: “Aumentó muchísimo la aceptación en estos últimos años”, expresó, aunque también aseguró que en redes sociales hubo “muchísimas publicaciones irónicas que decían ‘esto es una familia’ y te muestran un padre, una madre, un hijo”.

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