El gerente del proyecto, Ing. Nuclear Herman Blaumann, destacó que la construcción del reactor RA-10 “es un impacto para Argentina y el exterior en salud, ciencia y tecnología” y que permite que nuestro país esté en el top 10 de países que pueden construirlo hoy.

El reactor producirá radioisótopos que se utilizan en el diagnóstico y tratamiento del cáncer, por ejemplo, en los centellogramas. Se trata de un centro multidisciplinario con impacto, que demanda unos 340 millones de dólares de inversión. “Es un proyecto estratégico, hay una historia nuclear en nuestro país que nos permite hacer esto”.

Esta iniciativa de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) tiene un grado de avance del 80% y se espera que esté en operación en 2025.