Presunta complicidad con tráfico de cocaína CHACO

Carbón Blanco: avanza una causa contra funcionarios de Aduana

El fiscal general ante la Cámara Federal de Apelaciones de Resistencia, Federico Carniel, dialogó con el programa Demasiada Tarde, conducido por el periodista Brian Pellegrini en Radio Nacional Resistencia, sobre la resolución de ese tribunal que confirmó el procesamiento de un agente aduanero y revocó la falta de mérito de otros tres en el marco de un desprendimiento de la megacausa por el contrabando de cocaína a Europa conocida como Carbón Blanco.

Habíamos desbaratado a toda la organización narcocriminal y faltaba una pata que era la complicidad o no por parte de los organismos de control, que eso se verá en el debate. Pero haya sido por voluntad o por impericia son circunstancias que merecen ser juzgadas y en caso de que haya responsabilidad, deberán pagar los responsables”, explicó Carniel.

En ese contexto, el fiscal federal describió las fallas de los controles que permitieron el contrabando de media tonelada de cocaína a Europa. “Acá salió un contenedor con 500 kilos de cocaína con una imagen de scanner sospechosa y el contenedor se fue igual a Europa”, graficó.

“Nosotros queremos que no solamente se juzgue al personal que cumplía tareas menores, que es el que está procesado, sino que también hay una responsabilidad del jefe del sector. Y esto es lo que logramos, que comparezca el jefe del sector Exportación y que venga a dar explicaciones. Esa foto del scanner no estaba en el legajo del exportador sino en el estudio jurídico del principal imputado de la causa, Carlos Salvatore”, reveló Carniel. Al respecto, consideró que “esa imagen del scanner que tenía Salvatore era el certificado de pago. Es decir, Salvatore pagó para que salga el camión y algún empleado infiel de la Aduana le dijo: ‘tu camión salió, acá está el recibo’”.

Por otro lado, Carniel advirtió que “el galpón donde se cargó la droga en la ciudad chaqueña de Quitilipi nunca debió ser habilitado porque tenía serias deficiencias. Sin embargo, hay un jefe de la Aduana de Barranqueras que permitió la apertura y funcionamiento de ese galpón”.

“En las narices de los funcionarios de Aduana se camuflaron 1500 kilos de cocaína”, afirmó el fiscal federal. Al respecto, aclaró que “si bien había una logística y una inversión de una empresa narcocriminal de delito trasnacional, también es mucho más fácil si encuentra dentro de la Aduana gente permeable para poder realizar esta tarea, o por acción o por omisión”.

Por último, el fiscal ante la Cámara Federal avizoró que la causa pueda ser elevada a juicio oral antes de fin de 2020.