En la audiencia de este lunes el defensor oficial Ramiro Dillon -que no participó de una sola jornada en los 31 meses que lleva el debate- encabezó las exposiciones del grupo de abogados que está a cargo de la representación de los 28 ex integrantes de las fuerzas armadas, de seguridad y ex magistrados de la justicia federal en Mendoza que están acusados, entre otros delitos, por decenas de homicidios, privaciones de la libertad, torturas y violaciones cometidos durante la última dictadura, varios de los cuales ya han sido condenados en anteriores procesos. Con profusión de citas contextuales, ausencia de argumentos técnicos y una notoria estrategia agresiva respecto de víctimas, testigos, fiscales y querellantes, Dillon vertebró en sus análisis generales sobre el genocidio una férrea postura descalificatoria acerca de éste juicio en sí y de todo el juzgamiento de responsables del terrorismo de Estado llevado en nuestro país desde 2003 -entendido por él como el momento de “un golpe institucional a la legalidad argentina”-, y alcanzó a rebatir el propio concepto de lesa humanidad en base a un “totalitarismo de los derechos humanos por los ideologismos de turno”. También esgrimió una nulidad absoluta de los alegatos de la acusación. Mañana lo sucederá su colega Leonardo Pérez Videla, quien avanzará sobre las imputaciones en cada una de las causas particulares.
Defensor Ramiro Dillon sobre “nuevas inquisiciones” y “criminalización legal del enemigo como resultado de la judicialización de un conflicto político”. Audiencia del 19 de septiembre de 2016, Informe de Sebastián Moro.
Defensor Ramiro Dillon sobre “el relato criminalizador” y los juicios como “espacio de expiación para el sacrificio de chivos expiatorios”.
Fotografías: gentileza juiciosmendoza.wordpress.com.
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