La Delegación, a cargo de Mónica Arnaiz, viene trabajando en las últimas semanas en la coordinación de acciones que contemplen tanto a trabajadores como empleadores rurales. La tarea comprende gestiones de orden institucional con el gremio UATRE y la obra social OSPRERA; entidades de productores como la Federación de Cooperativas de Corrientes, y la vinculación directa con los organismos públicos que habitualmente trabajan estrechamente con el Registro.
Arnaiz indicó que ya se definieron algunas estrategias a ponerse en marcha en los próximos días, las que abarcan asistencia sanitaria, alimenticia y económica en algunos casos puntuales, en un esfuerzo por aliviar los efectos de la emergencia que padece el campo correntino y en sintonía con la línea de trabajo definida en esta contigencia desde el RENATRE central presidido por Ramón Ayala.
La delegada puso énfasis en que la delicada situación reinante impone un modo especial de trabajar para acompañar tanto a los empleadores como a los trabajadores rurales afectados. En esa línea, resulta vital la participación en los espacios generados por la emergencia para colaborar a la visibilización de las circunstancias ante los sectores públicos las circunstancias originadas para productores y trabajadores rurales a raíz de esta emergencia.
RENATRE Corrientes cerró 2018 con un destacado balance, ya que en materia registral incorporó cerca de 1100 empleadores al nuevo portal del registro, como resultado de intensivas acciones de promoción y capacitación, con frecuentes recorridas por la provincia. También sumó más de 10.100 trabajadores quienes ya cuentan con su Libreta de Trabajo en formato credencial. La oficina móvil de registración, los equipos sanitarios de OSPRERA y el acompañamiento de la UATRE caracterizaron la actividad desarrollada en distintos puntos de la provincia.
A la tarea se agrega la fiscalización realizada, la mayoría de la veces acompañados por organismos oficiales específicos como el Ministerio de Producción y Trabajo de la la Nación, la Dirección de Migraciones e incluso la AFIP y la Subsecretaría de Trabajo de la Provincia.
Arnaiz indicó que durante el año pasado prácticamente se duplicaron las prestaciones por desempleo. “Es una tendencia que lamentablemente se mantiene”, dijo en relación a este aspecto de la función del registro que administra el Sistema de Prestaciones por Desempleo (SIPRED). Indicó que la tendencia en parte obedece a la mejor comunicación del beneficio pero fundamentalmente al impacto sobre las economías regionales de las inundaciones y sequía de meses atrás, que mellan la capacidad productiva y se traduce en despidos en el sector agropecuario. Una situación que no muestra indicios de revertirse en las actuales condiciones originadas por la actual emergencia hídrica.