La concejal de UCR – Frente Cambia Mendoza, Gisella Caballero, en diálogo con LV4 comentó que movilizados por la necesidad de saber qué tareas de remediación se habían realizado después del cierre del vertedero, lo habían visitado.
“Nos encontramos con la sorpresa de que hay mucha más basura, no justamente en el lugar donde antes era el basural, sino en los alrededores. Y en el lugar donde fue el basural antiguamente, observamos que el trabajo de remediación que se necesita hacer, no se había hecho. Los materiales orgánicos, como animales, etc. Ya no hay rastros de ellos debido a los carroñeros o a la descomposición. Lo que si hay es una cantidad increíble de materiales que no se descomponen, como metales y plástico. En la mayoría de los casos lo que se observa es como montes verdes, que obviamente no se van a desintegrar. Observamos que en algunos lugares se ha puesto como una tela media sombra y arriba se ha echado ripio y lo que se observa es que la naturaleza ha ganado terreno sobre esas montañas de basura. Tenemos las fotos, lo que ha crecido es la naturaleza, que lo va tapando, pero no existe un proceso de remedición. Lo preocupante es que la basura está allí y así será por mucho tiempo más, si no se trabaja en eso. Además de la preocupación por lo descripto, el problema es la cantidad de basurales en las inmediaciones. Lo que se está armando, hay montañas de escombros que no se pueden llevar en autos particulares, los deben haber llevado camiones”.
Lo que entiendo que está pasando acá es que la población de San Rafael no tiene conciencia del daño que estamos causando, al creer que por arrojar los desechos lejos de nuestra casa, no hay peligro, no hay problema. Creo que desde el Municipio hay que largar una fuerte campaña de conciencia, que se puede trabajar con un montón de asociaciones intermedias, porque la verdad es que por donde vamos circulando se están armando grandes basurales.
L a concejal informó los puntos concretos que requieren respuesta: si se contrató alguna empresa dedicada al saneamiento de suelos, trabajos realizados en el vertedero, honorarios abonados, elementos químicos o mecánicos utilizados, tiempo de concreción, si se han repetido en el lapso desde que se cerró el depósito de residuos y con qué frecuencia, qué tipo de control ambiental se realiza en la zona y a cargo de quién está, si se ha cercado el perímetro y si tiene vías directas y/o alternativas de acceso.