Estado de la casa de la familia Cosentino

El siniestro se produjo en la madrugada del lunes cuando la casa habitada por la familia Cosentino quedó presa de las llamas (por un tronco que se desplazó del hogar). Oscar Araya, vecino contiguo a la propiedad afectada, fue el primero en acudir en auxilio de la familia, de cuyos integrantes, dos adolescentes permanecen internados por quemaduras, en la capital provincial.

Araya vive en la calle Mora 365. Todavía muy afectado por lo vivido, el hombre contó cómo ocurrieron los hechos desde que llegó a ayudar: “llego corriendo y me encuentro al pibe, a Genaro, en la calle todo lleno de ampollas.” Le dijo que se había prendido fuego la casa pero no habían podido salir todos “Antonella está adentro!”

El hombre dijo que ya estaba la policía tratando de arrancar la reja “y no podían”. El vecino fue a buscar un alargue a su casa “y con la moladora cortamos la reja.” Cuando Araya entró a la casa, “ya venía un policía con la nena en brazos, la sacamos y ella estaba consciente, nos hablaba y estaba muy quemada. Quemaduras en el rostro y en el cuerpo”- dijo el hombre muy compungido. Luego llegaron los bomberos, la pusieron en una camilla y la trasladaron, contó.

Los primeros en salir fueron el hijo adolescente y el padre de la familia, que quiso rescatar a todos pero se le quebró un pico al intentar romper la reja. Tanto el hombre como el adolescente habían atravesado las llamas para poder sacar a la madre y los niños pequeños. Antonella (15) se llevó la peor parte al permanecer más de media hora dentro de la casa abrasada por el fuego. El vecino comentó que hasta ahora siente ardor en el estómago y ojos y dolor de cabeza, por la inhalación de humo. Destacó el accionar de la policía y del oficial Osorio (que también sufrió intoxicación) quien rescató a la adolescente.