Por Daniel Corujo-

La gente entendió rápidamente que espíritu olímpico aterrizó en Buenos Aires para quedarse en el país hasta el 18 de octubre.

El primer día de los Juegos de la Juventud fue ideal. Miles de personas se volcaron a los distintos parques para alentar a los atletas argentinos y disfrutar de los extranjeros.

Los espectadores gozaron de cada deporte. Aplaudieron a todos. En especial a los pibes que se fueron derrotados. Y a los de BMX que se pegaron un “porrazo” los vivaron cuando se recuperaron.

Pero también son importantes los sonidos del deporte olímpico. Parado en el paso de las chicas en el triatlón se escuchaban aliento en todos los idiomas. Los entrenadores daban indicaciones subidos a la valla que demarcaba el recorrido. Y se entremezclaba lo que gritaba el australiano y el ecuatoriano. O el brasileño y el de Senegal. Ensalada de sonidos...

En cuanto al resultado, en el basquet 3X3 los varones comenzaron los Juegos con todo. Ante una muy buena cantidad de espectadores en el Parque Urbano, los argentinos vencieron a Estonia (campeón europeo) por 22 a 19 y a Rusia, con comodidad, 21 a 14.

Los Leoncitos, en el Parque Olimpico, superaron sin sobresaltos a Zambia por 6 a 2.  Y las chicas superaron a Vanuatú por 21 a 0 -Brisa Bruggesser (4), Constanza Cerúndolo (4), Josefina Rubenacker (3), Celina Di Santo (3), Gianella Palet (3), Victoria Miranda (2) y Sofía Ramallo (2)-.

En el tenis, en el Parque Verde, jornada positiva para los singlistas argentinos. Facundo Díaz Acosta eliminó en la ronda inicial al sudafricano Henning por 6-0 y 6-3; mientras que el dos del mundo, Sebastián Baez, venció a Ho de Taipei por 6-4 y 6-1.

En el triatlón, la oriunda de San Antonio de Padua, Delfina Orlandini, quien se cayó en el tramo de bicicleta, finalizó en el lugar 21 a cuatro minutos del oro olímpico, la sudafricana Schlebuch.