Anoche, en el estadio Padre Martearena de la ciudad de Salta, Gimnasia de La Plata venció en definición por penales a San Lorenzo por 4 a 2, mientras que en tiempo reglamentario habían terminado el partido 2 a 2. Con este triunfo, el Lobo platense pasó a las semifinales de la Copa Argentina.

Más allá de las lógicas bajas del Ciclón por las eliminatorias sudamericanas y los distintos torneos que está disputando a la misma vez el conjunto del uruguayo Aguirre, la victoria del Tripero fue inobjetable.

Desde el principio, el equipo de Gustavo Alfaro tenía muy claro lo que sus jugadores debían hacer para ganar este encuentro y el plan salió de maravillas: Gimnasia apretó bien arriba a San Lorenzo y lo hizo equivocar en innumerables ocasiones. De esta manera, llegó el primer gol: una equivocación en la salida azulgrana permitió el robo de Lucas Licht, que dio un centro preciso ante una defensa mal parada e inmediatamente Nicolás Ibáñez hizo el gol, a los 2 minutos de empezado el cotejo. Luego, los platenses siguieron jugando con la misma intensidad y los de Boedo siguieron cometiendo los mismos errores en salida, hasta que se fueron al descanso.

El segundo tiempo fue todavía más intenso, porque San Lorenzo estaba obligado a buscar el empate y ya quedaba un tiempo menos. La entrada del chileno Díaz y de Bergessio le dieron más vértigo al Ciclón, pero en otra jugada similar a la que propició el primer gol de Gimnasia, llegó el segundo: una corrida por derecha de Pablo Vegetti antecedió a un  centro al segundo palo y Ramiro Carrera solo la tuvo que empujar al gol. Entonces, hasta los 7 minutos del segundo tiempo, el Lobo ganaba por 2 a 0.

Sin embargo, con orgullo, el Ciclón fue a buscar el descuento. En un centro cruzado, Gonzalo Bergessio bajó la pelota de cabeza al corazón del área y, en gran estirada, Sebastián Blanco puso el 2 a 1. Más tarde, después de un tiro de esquina, el trasandino Paulo Díaz puso el merecido 2 a 2. Los dirigidos por Aguirre lo podrían haber ganado, pero del otro había un plantel que también sabe jugar estos partidos y que, a pesar de la expulsión de Maxi Coronel, tuvo la tranquilidad necesaria para aguantar y llegar a los penales.

Los penales fueron la mixtura entre el gran pateador y el arquero atajador de penales. Primero, Angeleri pateó mal y Arias hizo su trabajo: atajar el penal. Luego, el uruguayo Carteruccio pateó su penal a las nubes. Por el lado de Gimnasia, hizo muy bien sus tareas, embocando dentro del arco los cuatro penales pateados. ¿Resultado final? Gimnasia de la Plata 4, San Lorenzo 2.

De esta manera, el cuadro final de semifinales de la Copa Argentina quedó así: River Plate vs. Gimnasia de La Plata y Belgrano de Córdoba vs. Rosario Central. Además de llevarse un interesante premio monetario, el ganador de este torneo se asegura una plaza en la próxima Copa Libertadores 2017.

Pablo Paez

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