El sábado una manifestación de parte del gremio de gastronómicos en Iguazú impidió la inauguración del Autocine debido a la falta de pago de indemnizaciones a tres empleadas del lugar que se reinventó y antes funcionaba como hostel y bar de cerveza artesanal.
El propietario del emprendimiento, Francisco Beláustegui, denunció agresiones por parte de los manifestantes. “Les hicimos una oferta, porque tienen que cobrar, ellas se desvincularon de la empresa y no les corté el ATP”, comentó. Sostiene que sus empleados están registrados, cobrando sus sueldos y contentos.
Ante el cuestionamiento sobre pagos de sueldos con cerveza comentó que “Es una forma válida de pago, cuando no tenés posibilidad económica y buscas opciones es totalmente válido. Dimos más de 450 mil pesos de cerveza”.