El ministro de Industria, Trabajo y Comercio de la provincia, Raúl Schiavi, recibió a empresarios europeos que proyectan una inversión de 250 millones de dólares para construir una planta de aserrado de última generación en Gobernador Virasoro. El funcionario destacó que el interés del sector privado en la provincia se funda en la política de la gestión del gobernador Gustavo Valdés.
Raúl Schiavi, recibió a un grupo de empresarios belgas y austriacos, quienes le describieron el ambicioso proyecto de inversión de 250 millones de dólares que pretenden llevar adelante en Corrientes para la construcción de una planta industrial destinada el procesamiento de la madera. Se trata de un proyecto que se instalaría en Gobernador Virasoro, donde actualmente se construye una planta de bioenergía. El funcionario puso a disposición los equipos técnicos de su área para que pueda llevarse adelante la inversión y resaltó que “el sector privado mira a Corrientes como destino propicio para invertir por las señales claras que da la gestión del gobernador Gustavo Valdés con el desarrollo provincial como horizonte”.
La comitiva europea estuvo acompañada por el coordinador de gabinete del Plan Belgrano, Alfredo Vara, y un grupo de empresarios argentinos que ya tienen inversiones realizadas en el sector forestal, a través del grupo Garabí. También participó del encuentro el director de Promoción de Inversiones del Ministerio, Raúl Medina, quien explicó los alcances y beneficios que ofrece la provincia a través del Régimen de Promoción de Inversiones de Corrientes (Ley 5.470) y los procedimientos administrativos para adherirse al mismo.
Por el momento, la compañía realiza los estudios económicos y los empresarios recorren la zona de inversión para tomar contacto con el contexto local. El proyecto está planificado en cinco años y contempla la construcción de una planta de aserrado de última generación que se dará en varias etapas. La planta estará ubicada en un terreno lindante en donde actualmente se construye la planta de biomasa en Virasoro, ya que apunta además a utilizar residuos, subproductos y energía de la misma.
El plan de inversión está dividido en tres etapas, en la primera volcaran 80 millones de dólares y en la segunda 150 millones para procesar hasta 500 toneladas de madera con destino de exportación y van a contratar ambas instancias a 300 empleados. En la última etapa se prevé una ampliación hasta llegar a una inversión total de 250 millones de dólares, que permitirá procesar un millón de toneladas anuales de madera y al culminar empleará a 800 operarios. La envergadura del proyecto incluye la construcción de un barrio para ubicar a los trabajadores y sus familias.