Una multitud de diversidades participó el sábado de una nueva edición de la Marcha del Orgullo LGBTIQ+ que, de cara a las elecciones presidenciales, reclamó más democracia y cuestionó las posiciones "antiderechos". La responsable del Instituto contra la Discriminación de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires reflexionó sobre la actual coyuntura electoral y, esencialmente, sobre el avance de la ultraderecha.

María Rachid explicó que “la marcha siempre es un reflejo de lo que nos pasa y se ve reflejada en las consignas” que se impulsan.

En ese sentido, enfatizó que en esta edición “dijimos claramente Milei no” y, al mismo tiempo, las organizaciones se pronunciaron y remarcaron que “hay que votar a Massa”.

Advirtió que “estas elecciones no sólo amenazan a la diversidad sino a la sociedad en su conjunto” e insistió en que “la única forma de asegurarnos” de no perder derechos “es que Milei pierda”.

Rachid hizo un balance positivo de la marcha y detalló que, según datos del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, “hubo entre  1.700.000 y 2.000.000”.

“Fue increíble, estaba la Plaza de Mayo llena de gente, estamos felices de habernos podido expresar celebrando la diversidad como lo hacemos todos los años y expresando lo que pensamos en este contexto político”, indicó.

La manifestación copó la Avenida de Mayo desde Plaza de Mayo hasta el Congreso de la Nación con diferentes convocatorias que reclamaban "por un Orgullo con derechos y un Estado democrático que los garantice", mientras pedían frenar "a les antiderechos", en un contexto de avance de discursos negacionistas encabezados por la fórmula presidencial de La Libertad Avanza.

Había comenzado en Plaza de Mayo a las 10, con la Feria del Orgullo, que fue conducida por Nancy Sena, Emma Serna y Cumbia Dick, con la presencia de los DJs Fabián Jara y Alan Faboulus, y las actuaciones de Galga Tropikalia, Guido Morán, LaQueTeCumbió, Lucy Patané y el cierre a cago de La Joaqui.

La movilización comenzó alrededor de las 15 desde Plaza de Mayo hasta el Congreso, donde la Comisión Organizadora de la Marcha del Orgullo (COMO) realizó un homenaje a activistas, en un evento conducido por Alejandra Malem y Franco Torchia y musicalizado por los DJs Fabián Jara y Alan Faboulus, y las actuaciones de Bennettistas, BB Asul, Diego Frenkel, Anita B Queen, Ángela Torres, y un cierre a cargo de Natalia Oreiro.

Cerca de las 15.30, en cercanías del Obelisco la marea multicolor se mezclaba con la multitud azul y oro que comenzaba a concentrarse para seguir allí las alternativas de la final de la Copa Libertadores entre Boca y Fluminense que se jugaba esta tarde en el estadio Maracaná de Río de Janeiro; además muchísimas personas participaban de la marcha con indumentaria boquense.

La COMO, integrada por más de 60 agrupaciones, sostuvo a través de un documento: "lo decimos bien claro, ni un ajuste más, ni un derecho menos, porque nuestro colectivo es parte de la sociedad, es parte del pueblo, con sus alegrías y sus problemas. Y por eso, en estos tiempos de crisis, pobreza y desigualdad, no aceptamos que los gobiernos y los poderosos pretendan ajustar aún más nuestros ya castigados bolsillos, ni los presupuestos de las áreas públicas que deben garantizar nuestros derechos".

Desde la Comisión Organizadora de la Marcha del Orgullo - Línea Histórica (OLH), por otra parte, convocaron a concentrar a las 12 en el cruce de la avenida Roque Sáenz Peña (Diagonal Norte) y Florida, en el barrio porteño de San Nicolás, y resaltaron que "Orgullo es democracia".

En tanto, el Tercer Malón de la Paz, junto al colectivo de travestis-trans Las Históricas Argentinas y otras organizaciones, convocaron al "Malón del Orgullo" en Plaza Lavalle frente al Palacio de Tribunales.

La primera marcha en el país fue el 3 de julio de 1992 en una jornada histórica en la que unas cien personas del colectivo LGBTIQ+ se movilizaron desde Plaza de Mayo hasta el Congreso para reclamar por sus derechos.

Panorama Nacional, lunes a viernes de 6.00 a 7.00.