El papá de Justina, Ezequiel Lo Cane, destacó que “en 2019, un año después de la sanción de la Ley Justina, crecieron los trasplantes un 60%” y señaló que se “llegó a una tasa de donantes por millón de habitantes equiparables a la de Europa” que luego bajó a raíz de la pandemia de Covid-19.

“Hoy la tasa de donantes por millón de habitantes no sé si llega a 12 o 13, pero en aquel momento estábamos en 22”, dijo el padre de Justina, la chica de 12 años que falleció el 22 de noviembre de 2017 a la espera de un corazón, en diálogo con el programa Nunca es tarde que conduce Adrián Noriega.

Sobre el panorama actual, Lo Cane sostuvo que “la Ley Justina (27.447) no se cumple en su totalidad” y remarcó que “es necesario hablar de trasplante y donación en los colegios”.

Al respecto, agregó que crearon un protocolo de educación que presentan “en los ministerios de las provincias para que ellos lo bajen a los colegios y allí se hable de donación y trasplante”.

La norma dispone que “toda persona mayor de 18 años” es donante de órganos o tejidos salvo que haya dejado constancia expresa de lo contrario.

Lo Cane hizo hincapié en la importancia de explicarle a “la gente qué es la donación y el trasplante” y contó que aquellos que no quieren donar sus órganos “después de hablar con ellos y sacarles todas las dudas, terminan siendo donantes”.

“En 2022 se hizo algo así como si fuese el mundial del trasplante en Argentina y estuvimos en un panel donde estaban todas las religiones representadas y todas están de acuerdo con la donación y el trasplante”, contó.