Fabio Betinelli delegado de Villalonga, contó a Nacional Viedma que en estos días arribó a la localidad el camión de YPF que distribuye garrafas al precio que fija el gobierno de 97 pesos. "No vende a comercios sino a personas", dijo el funcionario.

Betinelli afirmó que es importante el porcentaje de conexiones al servicio de gas, aunque reconoció que "el barrio Esperanza tiene un sector de la cañería hecha" pero que "se depende de la ampliación del gasoducto Villarino - Patagones" para que se puedan sumar más conexiones.

"Hasta que no se termine el gasoducto no se puede ampliar porque Camuzzi no lo habilita", sostuvo.

Betinelli contó que Villalonga, entre habitantes permanentes y trabajadores temporarios tiene una población fluctuante de unas 10 mil personas.

Por otro lado, el delegado contó la compleja situación que atraviesa la actividad cebollera, que genera un fuerte movimiento económico y laboral la localidad. Resaltó que la ganadería anduvo bien pero involucra menos manos de obra.