En el Día Nacional de las Bibliotecas Populares, estas instituciones claves en la promoción de la lectura y el libro, están en alerta. "Estamos ahora en esta pelea de volver a una política, que era de estado, respecto de los libros, las lectura y las bibliotecas y que está por dejar de serlo", señaló en Radio Nacional de Córdoba, María del Carmen Bianchi, presidenta de la la Comisión Nacional Protectora de Bibliotecas Populares. El organismo que preside Bianchi otorga apoyo técnico y económico a las bibliotecas populares, fue creado por Sarmiento en 1870 pero fue en 1986 durante la presidencia de Raúl Alfonsín que se creó el fondo especial a través de la ley 23.351 que hoy está en riesgo.
La asignación de fondos específicos destinados al fomento y desarrollo de la cultura vence el 31 de diciembre por disposición de la Ley 27.432 sancionada en 2017 durante la gestión de Mauricio Macri. Si el Senado no aprueba su prorroga, que ya cuenta con media sanción de diputados, las bibliotecas populares "dejarían de recibir los subsidios de la CONABIP para solventar parte de sus gastos corrientes, para la conexión digital, para proyectos especiales" además del respaldo técnico.
La CONABIP ha repartido más de 20 millones de libros al alcance de los más de 4 millones de lectores que concurren actualmente a las bibliotecas populares de todo el país.