En un funeral histórico, el papa Francisco despidió a Benedicto XVI frente a 50.000 personas en el Vaticano.
En una despedida sobria y austera, como pidió el pontífice emérito que falleció el pasado sábado, la ceremonia fue en latín, con lecturas leídas en español e inglés y sin las súplicas finales; fuerte presencia de fieles alemanes, que pedían por “Benedicto santo”
Ignacio Patat, el vocero del Arzobispado, expresó: “La idea es que cada comunidad parroquial pueda agradecer”, agregó “Francisco lo decía un poco hoy, admirable su sencillez, su visión de pastor y su capacidad de ayudarnos a entender el nuevo dinamismo de la iglesia” finalizó.