La División Delitos Contra la Salud de la Policía de la Ciudad allanó, tras una investigación de la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental, una droguería que ocultaba con puertas secretas y paredes falsas medicamentos para distribuir en el mercado negro.

En el operativo, en la planta ubicada en el barrio porteño de San Cristóbal, se secuestraron más de un millón de cajas con medicamentos que se vendían en el mercado negro.

Esa mercadería ilegal está valuada en aproximadamente 150 millones de pesos, que se comercializaba en forma directa a negocios del barrio o clientes particulares, medicamentos sin la debida autorización.