El juez Darío Herrera quedó en el centro de la polémica, tras su flojo arbitraje en el estadio Monumental.
Y no solamente por los expulsados en el final del partido y por el dudoso penal en favor de River, sino que además fue marcado por no haber expulsado a jugadores que habían merecido la roja, o en su defecto la segunda amarilla durante el desarrollo del juego.
Herrera amonestó a siete jugadores en el primer tiempo, mientras que en la segunda etapa, Enzo Díaz y Milton Casco en River, al igual que Sebastián Villa y Nicolás Figal debieron ser expulsados.
En el VAR estuvo Silvio Trucco, que al igual que Herrera, fue parado por al menos una fecha.