Marina es una de las madres autoconvocadas en la Escuela de Arte, Nº 746 en reclamo de obras urgentes para garantizar la presencialidad. En diálogo con LU4 Nacional Patagonia, sintetizó el reclamo: “soy una mamá de una alumna de 4º año, antes de la pandemia sabía que había pérdidas de agua, baños en malas condiciones y problemas en los enchufes, con el paso de los años esto se agrava más. Los trabajadores venían reclamando y no hay respuestas, para nosotros esto es un agravante porque ni siquiera están dadas las condiciones para que funcionen las burbujas para estar un poco más conectados”.
Por su parte, Daniel Murphy el secretario general de la Escuela de Arte indicó: “esta situación deja sin clases a centenares de estudiantes de distintos niveles (secundario y superior), al gobierno solo les preocupa la imagen que dan para afuera, instalaron el relato de que las escuelas estaban en condiciones y podían empezar las clases, nosotros estamos mostrando la realidad. Lo último que ocurrió en este edificio es parte de una voladura del techo, tiene filtraciones hace mucho tiempo, hay problemas de calefacción y problemas eléctricos. A nadie le interesa si los chicos tienen clases o no, hay muchas personas sin clases por una irresponsabilidad.