La actualidad marca que el kilo de miel se está pagando entre 36 y 38 pesos (un dólar con 85 aproximadamente). “La verdad es que esperábamos que el precio se acomode un poco, pero no creemos que se modifiquen demasiado los valores al menos por el momento”, resaltó desde la localidad mendocina de Lavalle Rubén Mercado, quien añadió que escuchó ofrecimientos de 40 pesos, pero las operaciones reales se efectuaron a los valores antes mencionados y con plazos máximos de pago de una semana”.
Esos precios son los que manejan en general en todo el país, con algunos centavos por debajo para el caso de mieles más oscuras (34/35 pesos) y algunos centavos más arriba en operaciones puntuales, pero jamás superando los 38 pesos con cincuenta.
Frente a éste panorama los apicultores esperan guardar una parte de su producción intentando forzar un aumento y mientras tanto ir cubriendo los gastos diarios con ventas parciales, sin embargo esto dependerá de la realidad especifica de cada productor y en general no puede establecerse un panorama de comportamiento para las próximas semanas. “El que necesite dinero saldrá a vender, independientemente que el precio no le cierre demasiado”, explicaron las fuentes consultadas por nuestro medio.
Sobre estos valores desde Santa Fe Gustavo Tessini destacó “el precio no es tan malo si pudiéramos tener una cosecha de 25 a 30 kilos, pero con lo que sacamos en nuestra zona ni vendiendo la miel a 50 pesos salvamos el año”, y añadió “además debemos considerar que los insumos no paran de subir y ese es uno de los inconvenientes más grandes”. Como ocurre durante el desarrollo de cada cosecha el posible movimiento del precio a futuro es lo que todos los apicultores quieren saber, para tener un dato certero y a partir de ahí comenzar a manejar el juego de las especulaciones.
Sin embargo, esos datos siempre son presuntivos y con poca base concreta. Actualmente la cosecha es bastante mejor de lo que se suponía por lo cual no debería hablarse de grandes cambios hacia arriba en el precio por una cuestión propia de volúmenes disponibles, sin embargo se habla de una zafra de regular para abajo en Estados Unidos y bastante pobre en varios países de la Comunidad Europea, lo cual supondría una mayor demanda de nuestras mieles, pero en este aspecto siempre se debe considerar la fuerte irrupción en el mercado de otros países vendedores como Ucrania o Turquía y el aumento de la mal llamada miel china.