Ayer por la tarde, dos horas después que los choferes de Transporte Diadema iniciaron una retención de servicios por tiempo indeterminado, se levantó la medida de fuerza tras una promesa de pago por parte de la empresa. Desde la concesionaria del servicio, su titular, Ricardo Blanco, atribuyó la falta de pago al retraso en la percepción de subsidios municipales. Sin embargo, desde el Ejecutivo desmintieron una posible deuda y sostuvieron que las demoras son del orden nacional y provincial.
Hasta ayer por la tarde, los ocho choferes que prestan servicio para la empresa Transporte Diadema, que conecta ese barrio con el centro de esta ciudad, no habían percibido el pago de sus salarios de setiembre, que por ley deben ser abonados antes del cuarto día hábil de cada mes.
Por esa razón, luego del mediodía el gremio de la Unión Tranviaria Automotor (UTA) inició una medida de fuerza por tiempo indeterminado, tal como sus referentes habían advertido en horas de la mañana, cuando dieron plazo hasta el mediodía para que la empresa cumpliera con sus obligaciones patronales.
Todo hacía prever que la retención de servicios se extendería hasta el pago de los salarios. Sin embargo, sorpresivamente dos horas después, los choferes levantaron la medida. La razón fue una promesa de pago que realizó la empresa, tras un encuentro con autoridades municipales.
Así los trabajadores esperan que hoy por la mañana tengan depositado los salarios, caso contrario volverán a interrumpir el servicio, confirmó Fabián Huencheque, referente de UTA.
"Levantamos la medida porque nos dijeron que mañana (por hoy) a la mañana iba a estar la plata. Pero caso contrario vamos a parar", señaló, confirmando que hoy las autoridades de la empresa volverán a reunirse con autoridades municipales.