Juan Muñoz, director del Museo Nacional Terry de Tilcara, dialogó con el programa “El aire nuestro” sobre el origen de la muestra de dibujos que realizará el sábado 22 de mayo a las 10 horas en el hotel de Turismo y contó que “en el año 1964, el entonces director del museo Terry que era Félix Pereira realizó una serie de talleres en distintas escuelas de la puna y a estos chicos de la Escuela Nacional °25 (hoy Escuela de Frontera) los hizo dibujar. En el caso de La Quiaca, hay cerca de 30 chicos entre 4° y 6° grado del año 1964 que hicieron unos trabajos fantásticos, son unas obras que de esa manera no se trabaja en la escuela porque tienen mucho detalle, trabajo a pluma, pintura o en lápiz como si fuera un grabado.
Cuando asumo en el museo empiezo a trabajar en el inventario de los bienes y encuentro en la reserva, que es donde se encuentran las obras y los documentos más importantes del museo y es un espacio con temperatura controlada, humedad y materiales libres de ácido, las carpetas con estos dibujos de los chicos de La Quiaca y lo primero que pensamos con el equipo del museo es que esto había que mostrarlo acá.
Así que trabajamos con Carlos Rivero y con Blas Gallardo, nos reunimos y tomamos la decisión de hacer una exhibición de los dibujos el día 22 de mayo a las 10 horas en el Hotel de Turismo”.
El director además comentó que “nos estamos juntando y si a alguien le suena y son familiares o conocidos de José Rodríguez, Ramiro Choque, Anselmo Geoa, Santos Vilca, José Moscosa, Eleuterio Quispe, Eleuterio Mamani, Néstor Lima, Lorenzo Martínez, Odon Solano, Walter Blanco, Freddy Wayar, Gulpiano Cabrera, Albertina Cachizumba, Lucas Vera, Lidia Goméz, Cleto Carlos.
A mí me gusta mucho este proyecto, además de lo que mueven en las familias. Hoy nos reunimos con algunas familias que lamentablemente algunas de estas personas fallecieron y reencontrarse con el dibujo de sus padres, hermanos, hermanas, mueve un montón de cosas, pero además produce el diálogo entre las generaciones y la reflexión de qué cambió en La Quiaca en estos 60 años, cómo era en ese entonces la ciudad y cómo es ahora, cómo era la cultura en ese momento y cómo es ahora y esta idea de frontera que cruza distintas dimensiones”.
Según Muñoz, “esas historias viven porque yo veía por ejemplo entre los dibujos hay muchos de edificios, estos edificios de piedra de La Quiaca; la iglesia, la aduana, la escuela, que están en la ciudad. Uno camina pero por ahí al caminar la ciudad diariamente, hay cosas que las deja de ver y de pensar la historia que atraviesa esos edificios. Ver los dibujos, que los chicos en ese año habían prestado tanta atención a los edificios también nos trae una reflexión de la historia de esta ciudad, del momento de crecimiento, el comercio, el tren.
También eso nos da a pensar qué cambió en la cultura, si siguen siendo igual las comparsas y agrupaciones, cómo es el carnaval, qué significan esos edificios hoy en día, funcionan o no funcionan. Un montón de reflexiones que nos traen estos dibujos y que lo más mágico de esto es que esos niños ni sabían pensar cómo uno puede en sus actos estar transformando el futuro sin saberlo”.
