El tenor catamarqueño, Nicolás Romero, hace un resumen de su carrera musical que lo llevó a representar a Catamarca en el mundo.
Una gran dedicación y una voz privilegiada son las herramientas que pone en acción las expectativas de este joven.

Una película, una hermana insistente, un poco de locura fueron los condimentos que pusieron en marcha esta opción por un género difícil.

"Nunca imaginé, soy de acá, de La Chacarita, llegar al Colón". Este año seguirá estudiando en Buenos Aires y también en el extranjero con los profesores que lo guían y las expectativas de una temporada en Italia, con un profesional argentino que triunfa en Europa.

Los eventos que organiza, el apoyo del gobierno, la familia que acompaña son los sostenes para seguir abonando este sueño y posibilitar que no tenga techo en lo que se imagina para su futuro.

Nicolás es un muchacho tranquilo que de a poco va entendiendo que este es su camino, que como catamarqueño se siente orgulloso de su tierra.
Gentileza: elancasti.com.ar

Edición: Guillermo Farias