Lo afirmó el ministro de Gobierno, Dalmiro Garay en relación a la intención del Poder Ejecutivo provincial de reformar la carta magna mendocina que data del año 1916.

En un extenso diálogo con los periodistas el titular de la cartera política renovó sus críticas al justicialismo por evitar el debate reformista dijo que esta cuestión excede el marco político coyuntural y opinó que un cambio de fondo implica renovar instituciones regular nuevas actividades y discutir los mandatos de todos los funcionarios públicos.