A 102 años del nacimiento de Ángel Labruna, el ex arquero de River y la Selección Argentina, Ubaldo Fillol, recordó la figura del ídolo del Millonario y contó todo lo que representó para él como entrenador: "Nos decía que teníamos que quedarnos toda la vida a vivir y trabajar en River, y transmitirle a las nuevas generaciones todo lo que significaba River".
Podcast: Bajar
Suscribirse en Spotify | ¿Qué es Nacional Podcasts?
En diálogo con Radio Nacional, el Pato recordó algunas anécdotas que vivió con Angelito como entrenador, primero en Racing y, posteriormente, en River.
El Pato se caracterizaba por ser un gran atajador de penales. Entonces, durante un entrenamiento, Labruna le dijo que le iba a patear unos penales. Fillol ya tenía pensado dejarse hacer algunos, ya que Angelito era el entrenador. Pero no atajó ninguno. De hecho, ni siquiera acertó el palo.
Labruna ya estaba pisando los 60, y, con su postura, lograba confundir a uno de los mejores arqueros de la historia del fútbol argentino. Ahí tomé dimensión de lo que había sido ese hombre", expresa.
"Lo que representaba para nosotros como técnico era impresionante, la mística que tenía, respetaba a rajatabla la historia de River", cuenta.
En otro tramo de la entrevista, Fillol habla sobre sus inicios en Quilmes, club en el que debutó, en 1969, rememora su increíble atajada ante Johnny Rep, en la final del Mundial '78 contra Holanda, y cuenta una increíble anécdota junto al ex presidente de la AFA, Julio Grondona.
"Yo tenía que hablar con Grondona y me dice que lo espere en una estación de servicio. Eran las 8:30 de la mañana, y le digo '¿por qué me cita acá, Don Julio?'. 'Porque yo entro a la AFA y es todo 'no', me dice. 'Yo entro a la AFA, pongo el pie derecho para entrar y ya estoy computado para todo lo que piden 'no'".
Grondona ya era vicepresidente de FIFA, y le prometió a Fillol conseguirle una medalla del Mundial '86, debido a la actuación del Pato ante Perú, en un sufrido partido que selló la clasificación de la Selección a México.
Etiquetas: Alejandro Apo, Ángel Labruna, Todo con Afecto, Ubaldo Fillol