Gastón Irazusta, secretario de Turismo de Entre Ríos, contó cómo se viven las vacaciones de invierno en la provincia. Indicó que con el feriado del 9 de Julio se vivió un intenso movimiento turístico que llegó al 70 por ciento de la capacidad hotelera. Luego, “decayó” un poco y durante el fin de semana del 17 de julio “comenzó un proceso de recuperación y hoy estamos en plena curva ascendente, no solamente de visitantes, sino también en las reservas”.

La provincia comenzó el receso invernal de dos semanas el 9 de Julio con ese feriado nacional. Con el anuncio de la apertura del turismo con circulación, Entre Ríos recibió visitantes de diferentes provincias limítrofes. La reactivación de las reservas comenzó durante la segunda semana, cuando otros distritos iniciaron su receso.

Si bien, Irazusta aseguró que fueron unas vacaciones “atípicas” en el marco de la pandemia, con el avance del plan rector de vacunación contra el coronavirus, los turistas se animaron a viajar y disfrutar de unos días en la provincia. El territorio ofrece diversos atractivos durante invierno, siendo los más elegidos los complejos termales distribuidos en diferentes localidades entrerrianas.

El fin de semana del 17 de julio “comenzó un proceso de recuperación y hoy estamos en plena curva ascendente, no solamente de visitantes, sino también en las reservas”, indicó el funcionario provincial.

Sobre las estadías, Irazusta informó que se eligen entre dos y tres noches para pasar en la provincia.