En una reunión ampliada de las comisiones de Medio Ambiente y Servicios Públicos del Concejo Deliberante de la capital salteña, profesionales en Ingeniería y Medicina plantearon la necesidad establecer en las ordenanzas medidas que permitan contar con antenas más seguras para la Salud.

Guillermo Defays, máster en Sistemas de Telecomunicaciones, sostuvo que se debe prestar especial atención a los límites de densidad de potencia que en Argentina es de 1000 microvatios por centímetro cuadrado, mientras que en otros países ya se está planteando la necesidad de que sean 0.1 microvatios por centímetro cuadrado.

Así lo explicaba Defays en Nacional.

La especialista en Neurología de la UBA, e integrante del Instituto Roffo, Alejandra González Roffo, por su parte, indicó que la Organización Mundial de la Salud (OMS), califica a las antenas dentro de la categoría 2B, posible carcinógeno, lo cual implica que ante su incidencia pueda predisponer a un organismo a contraer alguna enfermedad oncológica.

En diálogo con Nacional, González Roffo decía lo siguiente