Ese Tucumán que desatara en Yupanqui el misterio de la baguala y la Zamba, es la misma provincia que diera a la voz de la zafra, Mercedes Sosa y a la pedagoga más importante de la música folklórica argentina, Leda Valladares.

Ese mismo Tucumán ha engendrado el 10 de marzo de 1918, a un artista parecido a su historia, a sus paisajes simples y complejos:

“Mi música es una cosecha emocional del paisaje, es mi vida a través del canto y sobre todo Tucumán, al que quiero tanto”. (Rolando Valladares, el Chivo).

Rolando Valladares, el Chivo; creador, e intérprete del eco cultural de los cerros y de las vidalas desesperada de los valles.

Varias de sus obras llevan las letras de poetas fundamentales de nuestra cultura popular, otras, se las dictó el viento que moldeara las bagualas y los silencios de los cerreros.

Muchos artistas se destacan por su dedicación a la chacarera, otros a la zamba, y por supuesto al chamamé. El chivo es un héroe de la vidala, de todo eso que significa la vidala, de toda la vida que cabe en la vidala, de todo lo que sólo se puede decir en vidalas.

Rolando Valladares, el Chivo, autor de más de canciones, zambas,tonadas y vidalas principalmente; su espíritu, ante todo, estaba hecho de vidalas. Algunas de sus obras como autor y compositor fueron Este Tucumán mío, Horco molle, Lejos, Mi pasión, Noches de luna, Subo, Vidala de mis veinte años, Zafra de canto, Tarco viejo.

Muchas de las canciones de Rolando Valladares llevan la letra de poetas como Raúl Galán, Manuel José Castilla, José Augusto Moreno.

LOCUCIÓN: S.M TOVARICH
ACTOR: OSCAR NAYA
EDICIÓN ARTÍSTICA: TANO SALVATTORI
PRODUCCIÓN: ALEJANDRO CAROSELLA Y FABIANA ALVAREZ
AUTOR: PEDRO PATZER