Boca habría pegado un volantazo en el cierre de la semana de negociaciones y es porque en Portugal dieron por caído el pase de Eduardo Salvio, uno de los refuerzos de peso al que había apuntado Nicolás Burdisso.

La operación con Benfica, que pretendía desprenderse de uno de los contratos más altos del plantel, se iba a realizar a préstamo por un año con opción de compra, cuyos montos no trascendieron. Pero el medio A Bola, uno de los más prestigiosos del país luso, fue el encargado de filtrar la noticia y asegura que ahora "

El xeneize avanzará por otro jugador tras perder el interés por el ex Lanús"