La intendente Trigo decidió vetar la iniciativa que había surgido del PJ y que fue avalada por mayoría en el Concejo Deliberante santarrosino. La norma establecía que cuando un empleado municipal muriera, su cargo fuese ocupado por su esposa o hijos.

Norma Trigo, explicó las razones que la llevaron a decidir el veto y dijo que la Municipalidad a su cargo sigue estando sobredimensionada en personal.

La funcionaria recordó que “la iniciativa fue del concejal Gustavo Ibarra, del Frente para la Victoria y suponía que cualquier familiar, ya sea hijo, esposa, pareja de una persona que fallece, renuncia o que deja su cargo en el Municipio, fuera ocupado por alguna de esas personas. El proyecto fue aprobado y esta es la primera ordenanza que he vetado”:

Trigo fundamentó su decisión “por muchos motivos. En primer lugar nosotros estamos adheridos a la Ley provincial, que regula el ingreso a la Administración pública a través de concurso”.

“Santa Rosa pasó por una situación muy especial, donde la planta permanente del Departamento llegó en algún momento a 3.000 personas, con una población de 16.000 habitantes. En este momento la planta permanente de personal suma en total 1.300 personas, que es un número excesivo, porque esta Municipalidad con 16.000 habitantes, con 500 o 600 empleados públicos podría estar perfectamente atendida”.