Trabajadores Vitivinícolas Autoconvocados reclaman esta mañana en el nudo vial (ingreso a la Ciudad) a modo informativo, no cortan el tránsito, sobre sus condiciones salariales. Simplemente exponen carteles donde cuentan su realidad de "precarización absoluta". El sindicato que debería representarlos (Soeva) no los acompaña en sus exigencias además de cerrar a puertas cerradas con las patronales de la vitivinicultura, según señaló Fernández.

"Nosotros somos quienes en verdad hacemos la vendimia, la gente lo tiene que saber", dijo el trabajador en un contexto en que la canasta básica de alimentos roza los $200 mil pesos y se prevé que en el mejor de los casos a partir de febrero, con los acuerdos alcanzados por el gremio, un obrero de viña blanqueado cobre $70 mil y un obrero de bodega $72 mil.

Los trabajadores temen que las paritarias de febrero de pasen para después de las cosechas, lo que podría ser en abril.

Hoy es el Día Provincial de Trabajador y la Trabajadora de Viña y sus condiciones paupérrimas de vida permanecen igual que décadas atrás, incluso han empeorado: "Estamos en la indigencia, no podemos confiar en nuestro sindicato si vivimos día a día, si no podemos darle futuro a nuestros hijos", lamentó.